Dos años del Código de las Familias: no todo prende, pero se avanza
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“Las personas se han ido apropiando de las distintas posibilidades y beneficios que permite la Ley, pero los juristas tenemos muchos retos todavía, porque hay figuras que aún son desconocidas para la población”, afirmó Olga Lidia Pérez Díaz, directora general de Notarías y Registros Públicos del Ministerio de Justicia, al evaluar la implementación del Código de las Familias justo a los dos años de su entrada en vigor.
Puso como ejemplos los pactos matrimoniales (mil 479 realizados ya), en relación con el régimen económico. “Se abogaba antes por tener más opciones al formalizar una relación, y ahora que las tenemos, se hace poco uso de ellas”, comentó, al referirse a la posibilidad de casarse con separación de bienes o una combinación mixta entre esa opción y la comunidad matrimonial.
Otra figura casi inexplotada es el contrato de alimentos (solamente se han concertado siete) mediante el cual una persona se hace cargo de otra que tiene vulnerabilidades y por ese cuidado y apoyo emocional puede acordar la transferencia futura de su vivienda.
“El Código es complejo, muy abarcador, con figuras novedosas, y si no somos capaces de explicárselo a la población, pues no van a usarlas”, apuntó.
El propio Ministerio de Justicia ha asumido iniciativas de comunicación como un espacio permanente los lunes en el programa Haciendo Radio de Rebelde, “pero eso tenemos que incrementarlo en todos los niveles, para que de verdad esta Ley tenga el impacto que nos planteamos desde el inicio”.
Puso también como ejemplo lo que se hace en materia de prevención de la violencia de género, sobre la base del Programa Nacional para el Adelanto de las Mujeres y en coordinación con la FMC, para identificar los sectores que tienen que brindar servicios cuando se produzcan casos de violencia, “pero hay otros temas que se nos están quedando atrás”.
Las inscripciones de infantes con el primer apellido de la madre es otra de las opciones que Pérez Díaz avizoraba como de mayor uso y solo ha habido hasta el momento 45 casos, precisó.
“Su implementación es positiva, hay avances graduales, pero podríamos tener en este momento un mayor empleo de sus potencialidades”, enfatizó, sin dejar de reconocer que todavía es un Código muy reciente.
Otras instituciones familiares significativas que introdujo la nueva legislación y han tenido un mayor uso son las escrituras de disposición con asentimiento, para autorizar el traspaso de viviendas (11 mil 532 registradas) y el consentimiento para acceder a técnicas de reproducción asistida (3 mil 188).
La revocación de donaciones (153), los divorcios con escucha del menor (64), la delegación de responsabilidad parental (61) y los pactos de convivencia en parejas que formalizan su unión de hecho afectiva (19) son otras variantes con un uso muy discreto todavía.
Punto y aparte merecen los matrimonios entre personas del mismo género, una muy esperada y necesaria conquista de las personas LGBTI, que ya alcanzan los 2 mil 120 (entre hombres mil 271, y 850 de mujeres), así como su equivalente en uniones de hecho afectiva, con 282 parejas (200 de hombres y entre mujeres 82).
Para poder concretar todas esas alternativas también ha habido un incremento gradual del número de notarías, las cuales ya son 305 en el país (50 más que en 2019 y nueve por encima del pasado año), aunque se mantienen las restricciones con el personal (82% de la plantilla cubierta) que afectan la rapidez y calidad de sus servicios.
El Código, por su parte, sigue siendo un referente para otras naciones en materia de derecho de familias, lo cual ha sido reconocido por personas expertas en reuniones internacionales, donde se ha llegado a calificarlo como “el más avanzado del continente americano”.
Otro fruto: la Defensoría
Alejandro Redondo Ramos, director de Defensoría del Ministerio de Justicia, también abundó sobre la gestión de esa institución nacida en mayo de 2023 como resultado de la implementación de los códigos de las Familias y de Proceso, en cumplimiento de la Constitución.
Como parte de su misión de protección, garantía y restablecimiento de los derechos de las personas en situación de vulnerabilidad, los asuntos familiares tienen un peso importante en la labor de la Defensoría, la cual hasta inicios de septiembre ya había tramitado un total de 494 casos, entre ellos 190 en esa materia.
Con una dirección subordinada al Ministerio de Justicia, y departamentos en cada dirección provincial, la nueva estructura cuenta con 580 defensores que velan por la más rápida y beneficiosa solución de cada asunto.
También agrupa a consultores que son expertos en determinadas ramas del Derecho y pueden dictaminar, asesorar y acompañar al defendido y al defensor para un mejor ejercicio de sus funciones.