El Registro del Estado Civil y su impacto en la cotidianidad de las personas

Los asuntos relacionados con el Registro del Estado Civil siempre despiertan el interés de la población por el alto grado de incidencia que sus oficinas tienen porque en ellas se inscriben actos y hechos relacionados con el estado de las personas.

  También constituye también un medio para la formación de estadísticas demográficas, de salud y otras de interés social; así como tributa información esencial sobre la cantidad de nacimientos, matrimonios y defunciones ocurridos en el país, información crucial para la planificación de los recursos económicos y materiales, toma de decisiones e implementación de políticas públicas por parte del Estado y el Gobierno.

  Para las personas es una visita obligada para formalizar matrimonios, inscribir a los recién nacidos, subsanar errores en las inscripciones; realizar cambio, adición, modificación o supresión de nombres y apellidos, y solicitar inscripciones como la de nacimiento, matrimonio, defunción y ciudadanía, en su mayoría para solucionar litigios de vivienda, emigrar o gestionar disímiles cuestiones.

 ¿Cuántas personas no acuden a sus oficinas en busca de certificaciones que les permitan iniciar el proceso de obtención de la ciudadanía de otro país, gestionar la llamada balita de gas en las oficinas de la Empresa de Gas Manufacturado, o una chequera en las oficinas municipales del Instituto Nacional de Seguridad Social (INASS)?

En la actualidad el Registrador del Estado Civil cuenta con importantes herramientas de labor como la Plataforma Bienestar, sistema informático diseñado con el fin de elevar la calidad de los servicios jurídicos, desde donde los usuarios pueden acceder a las certificaciones con firma digital y ahora con la Plataforma Soberanía capaz de introducir la circulación en el trafico jurídico del documento electrónico para tramites nacionales.

En estos  Registros, subordinados a  los órganos del Poder Popular en cada municipio o provincia, según su competencia, se realizan además  de los ya mencionados procesos y trámites relacionados con las inscripciones de notas marginales,  Inscripciones fuera de término de nacimientos, matrimonios y defunciones,  reconstrucción o reinscripción de asientos, toma de declaraciones, formalización de matrimonios,  búsquedas de inscripciones, reconocimiento de filiación materna o paterna y denegación de inscripciones o reconocimiento de filiación.

A sus oficinas pueden acudir tanto personas naturales como jurídicas con el único requisito de estar legitimadas para el acto pretendido.

No obstante, es imprescindible que la población conozca que en dependencia del objetivo perseguido habrá quienes asistan en condición de Comparecientes, - personas obligadas a declarar ante el Registrador o promuevan asuntos relacionados con hechos o actos del estado civil- y en este caso puede optar por asistir o nombrar una representación.

Esa Representación es la autorización concedida por la ley o por la persona interesada mediante un acto jurídico, en virtud de la cual el representante tiene facultades para sustituir al representado y ocupar su lugar en cuanto sujeto de la relación jurídica.

Es bueno aclarar que esta comparecencia puede ser legal o voluntaria.

Voluntaria es cuando una persona autoriza a su representado para actuar por su cuenta y le concede un poder con el cual actuar en nombre de otra y producir efectos en la esfera jurídica del representado. Igualmente es válido un contrato de servicio jurídico.

A diferencia de la modalidad anterior la autorización de la Legal para que una persona actúe en nombre y en interés de otro sujeto la concede la ley a partir del presupuesto de incapacidad del interesado para la realización de un acto jurídico, bien porque esté declarado incapaz por enfermedad, edad, ausente o ser menores de edad, tutelados o incapacitados.